Renovar el sofá: 7 trucos para no tener que comprar otro

El sofá es uno de los muebles que más se desgasta con el paso del tiempo. Esto se debe a que se encuentra en la sala de estar, una de las zonas más utilizada y por tanto, con mayor tráfico en tu hogar. 

Así pues, es fundamental mantener el espacio ordenado y en condiciones óptimas junto a un sofá bonito. Por ello, hemos preparado varios tips para que puedas renovar el sofá sin tener que comprar otro:

Haz limpieza en el sofá

Lo primero que debes hacer es hacer una limpieza profunda de tu sofá para conseguir que parezca uno nuevo. 

No obstante, a la hora de limpiarlo debemos considerar el material con el que ha sido fabricado.

En el caso de que tu sofá sea de tela, deberás pasar el aspirador y poner atención a todas las esquinas y rincones. Además, tienes que darle la vuelta y aspirar por abajo.

Mientras que si el sofá tiene una funda lavable, basta con que laves la envoltura y aspires la base del sofá.

Por otro lado, si se trata de un sofá de piel, el proceso deberá incluir un detergente neutro diluido en agua y con ayuda de un paño humedecido limpiarlo. Posteriormente, emplea un paño blanco y suave para secar el sofá. ¡Ojo! No utilices acondicionador ni productos químicos.

Renovar el sofá quitando las manchas

Si tu sofá está manchado y es de tela, puedes limpiarlo con un trapo impregnado en vino blanco, dando toques suaves sobre la mancha y lavar posteriormente con agua y jabón neutro.

Mientras que si las manchas son de café, tienes que formar espuma con detergente líquido e incoloro y dejarlo sobre las manchas varios minutos.

Posteriormente, con ayuda de un trapo humedecido en amoniaco al 10% diluido en agua, quita la mancha. Finalmente, tendrás que secarlo con aire caliente.

Cuando el sofá es de piel y está manchado de vino o café, lo mejor es frotar con delicadeza las manchas con un paño con agua. Después, utiliza un trapo seco y limpio.

En el caso de manchas de grasa, bastará con un paño empapado en un poco de jabón neutro y luego secarlo con otro trapo sin mojar.

Mantén el volumen de tus cojines

A menudo, tenemos el problema de que nuestros cojines y respaldos pierden volumen. Este aspecto es importante puesto que te ayuda a tener tus sofás en buenas condiciones.

 Para ello, deberás rellenarlos con materiales como la espuma de poliuretano, plumas, rellenos sintéticos de látex o fibras soft.

Sustituye las fundas y cojines del sofá

Cuando el sofá está en óptimas condiciones pero necesitas darle otro aspecto, un cambio de fundas es la opción ideal.

En el mercado actual venden una infinita variedad de fundas de todo tipo de estilo y color. Asimismo, la mayoría son lavables, por lo que facilitará la limpieza del sofá.

Nuevo tapiz para renovar el sofá

Como alternativa a la idea de las fundas, también puedes recurrir al cambio de tapiz del sofá. Es una opción más costosa pero el cambio será mucho más notable y personalizada, por lo que merecerá la pena.

Utiliza cojines y mantas

Cuando los cojines están muy desgastados es mejor renovarlos, e incluso, si tu intención es únicamente probar otro color. Esta opción te ayudará a proporcionar una imagen mejorada al sofá.

Asimismo, cuando coloques los cojines debes incluir menos que las plazas para que sea más estético. Por ejemplo, si tu sofá es de cuatro plazas, bastará con 3 cojines.

Por otro lado, las mantas nos permiten experimentar con el diseño del sofá. Pues, existen diferentes colores, estampados y estilos. Asimismo, podrás colocarla en las esquinas o dobladas el centro.

Reemplaza las patas

La sensación de que un sofá puede desmontarse es muy desagradable. Por esta razón, es importante que hagamos un mantenimiento cuando para controlar que ninguna pata esté rota y de ser así, asegurarnos de que nuestro sofá recupere la estabilidad.

Además, cuando sustituyas las patas del sofá puedes utilizar materiales como la madera o el metal y agregarle un aspecto diferente y renovado.